Juana Virgen deja de seguir el sonar de los tambores que a su espalda le han obligado a tomar ritmo. Mario Zamora va al encuentro y ella aguarda su arribo.
Mario Zamora apunta alto a las gradas del polideportivo “Horacio Llamas” de Rosario. Ha escuchado que una mujer le grita. El próximo gobernador de Sinaloa salta la barra de protección y sube entre la gente.
Es de Mataderos, una comunidad a 20 minutos de la cabecera municipal. Juana Virgen da sus motivos, explica por qué está ahí bailando y coreando las canciones de la campaña de Mario Zamora.
“Nosotros andamos luchando por ti. Mario Zamora estamos contigo. Andamos en la avanzada y gritando por Mario Zamora”.
Juana Virgen le enseña las suelas de sus zapatos. Desgastadas dice, porque todos los días sale a la calle a sumar gente a este proyecto que Mario Zamora ha venido construyendo y que en los últimos 24 días refuerza con las voces y sensaciones de la gente.
En las gradas del polideportivo el antagonismo histórico se ha dejado de lado. Las banderas panistas, priístas y perredistas se sacuden. Los tres partidos han puesto en el centro de la agenda el proyecto de Mario Zamora.
“Se ve, se siente, Zamora está presente. Aquí, allá, Zamora va a ganar”, grita Juana Virgen.
Y si en Mataderos Juana Virgen ya ha dado su voto por Zamora, en Cacalotán la gente también anda animada.
«¿Y vamos a sacar muchos votos en Cacalotán?”, pregunta el candidato de la coalición “Va por Sinaloa”.
“Huuuuy, todos estos están apuntados…”, responde Rocío y señala y recorre con el índice al puño de personas que le acompañan.
“Este ambiente, esta fuerza, esta energía es Sinaloa”, señala Mario Zamora.
EL GRITO DE CONCORDIA
Fundada en 1565 por Francisco de Ibarra, Concordia también proveyó de su encanto y grito a la campaña de Mario Zamora.
“¡Mario, Mario, Mario, Mario!”, sonaba en la plazuela principal de Concordia.
Zamora arreciaba el paso por una de las calles mientras saludaba a comerciantes de la zona centro. El Pueblo Señorial recibía a Zamora. El pueblo y el grito por su candidato.
“Aquí hay energía, aquí hay ganas, aquí hay pasión por lo que estamos haciendo”.
ESCUINAPA MUESTRA SU GRITO
En Escuinapa el grito es azul. La calle 22 de Diciembre está llena de panistas.
“¿Y usted que va a hacer por Escuinapa?”, grita una mujer con su bandera albiazul.
“Traer el agua”, le responde Mario Zamora desde el templete. “Y apúntenlo y grábenlo”.
Mario Zamora sube el tono de su discurso. La emoción le fluye.
“Todos somos de barro, pero no es lo mismo bacín que jarro”.
Y las banderas bailan, casi gritan.
Mario Zamora sale de Escuinapa poco después de las 19:00 horas. Va a Mazatlán. Allá en el puerto fue el mismo grito. Mario va a ganar.
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Que no te confundan ni te engañen. Los programas sociales como el apoyo a adultos mayores, salud y becas para la educación son un derecho constitucional que Mario Zamora votó en el Senado, nadie se los puede quitar. En su gobierno serán fortalecidos pero además se rescatarán los programas de estancias infantiles para ayudar a las mamás trabajadoras, se luchará para recuperar los apoyos al campo, el empleo temporal, los comedores comunitarios, los refugios para proteger a mujeres víctimas de violencia y los programas en beneficio de la pesca.
