GUAMÚCHIL.- A 28 años del fallecimiento de quien fue candidato a Presidente de México Luis Donaldo Colosio Murrieta, priistas de Salvador Alvarado montan guardia de honor y colocan ofrenda floral.
El Presidente del Comité Municipal del PRI Marco Antonio López González acompañado de expresidentes municipales, expresidentes del partido, regidora, líderes de sectores y organizaciones, acudieron esta mañana al busto en honor a Luis Donaldo Colosio para recordarlo y honrar su memoria.
Así mismo se pidió un minuto de silencio por el descanso de quien fuera jurídico del CDE del Pri en Sinaloa Gonzalo Estrada.
El discurso oficial corrió a cargo de Cesar Adrián Tafoya Díaz quien indico:
“Sin duda todos recordamos esas frases del brillante discurso que dirigiera a México el 6 de marzo del 1994, en medio de su campaña presidencial, tan solo 17 días antes de su muerte.
“Veo a un México con hambre y con sed de justicia” todos recordamos dijo en aquel mensaje, que renovaba las esperanzas de una nueva era para nuestro país, de la mano del líder nato y carismático que era Colosio.
Todos los años en su natalicio, así como en su aniversario luctuoso, recordamos la célebre frase.
Sin embargo, debemos de preguntarnos ¿A estos datos se reduce la importancia de Luis Donaldo Colosio para este partido y este país? O ¿Hay otras reflexiones que desde hace tiempo no hemos desempolvado de entre el ideario, vida y obra de tan relevante personaje? ¿Cuáles de estas reflexiones están hoy más vigentes que nunca ante la circunstancia actual del PRI y de México?
Colosio nos puso siempre el ejemplo; su carisma e influencia no eran un accidente.
La gente dentro y fuera del PRI lo quería y creía en él porque supo siempre estar cercano a ellas, ser sensible a sus necesidades e inquietudes; supo escuchar, supo caminar hombro con hombro con ellos, supo hacerlos sentir incluidos, parte de un proyecto, supo brindar esperanza de un mejor porvenir.
Hoy, nos encontramos en una disyuntiva al interior de nuestro partido; frente a nosotros se bifurca el camino y debemos de definir que sendero queremos tomar.
¿Seguiremos con las viejas tradiciones y practicas partidistas, anquilosadas y rígidas, sin comprender que en este momento hemos dejado de ser el otrora partido hegemónico en el poder? O ¿Tendremos la audacia de ser autocríticos y comprender que hoy, más que nunca, debemos de tomar en cuenta en incluir a nuestra militancia de forma directa en la toma de decisiones y la dirección que el Revolucionario Institucional deberá tomar de cara a nuestro presente y nuestro futuro?
Rescatemos pues, esta invitación que Colosio nos extendía a reconocer nuestras fortalezas y nuestros retos, y a hacer, llenos de orgullo, nuestro al partido, buscando ver de frente a nuestra militancia y brindándole lo más fundamental que tenemos la responsabilidad de darle: la capacidad de tomar decisiones, de expresarse, y de elegir. Permitirles que genuinamente sean forjadores directos de la nueva etapa que al PRI le espera.
Incluyamos a todas y todos: mujeres, hombres, a quienes han crecido entre calles y edificios, a aquellos que han pasados sus días en el campo y en las costas, a la frescura y juventud llena de energía e innovación, a la sabiduría y experiencia probada, a quien desde un escritorio arrastra una pluma, a quien diario gasta la suela en el territorio.
Brindemos genuinamente los espacios necesarios a nuestros militantes, y como verdaderos demócratas que somos, impulsemos que sean coparticipes de la renovación que inevitablemente nuestro partido debe de sobrellevar.
En el PRI, sin duda alguna, siguen vivos y fuertes los valores que este importante líder que hoy recordamos y honramos nos compartió, nos heredó.
Habremos de estar siempre abiertos, atentos, con vocación de servicio, listos para escuchar, y más listos aún para trabajar.
Unámonos más ante quienes a diario buscan dividirnos como mexicanos; propongamos soluciones ante quienes solamente saben dar excusas; pisemos fuerte nuestro presente y avancemos con decisión hacia el futuro frente a aquellos que solo saben voltear al pasado; seamos transparentes y honestos para diferenciarnos de los que se empeñan todas las mañanas en decir verdades a medias, distraer e inventar otros datos; seamos abiertos y respetuosos en lugar de quienes buscan intimidar y acallar todas las expresiones, en especial aquellas que no concuerdan con ellos.
Nuestro compromiso primordial en el Partido Revolucionario Institucional debe de ser con la democracia y la justicia social.
Así lo hubiese querido el mismísimo Luis Donaldo Colosio, y así lo habremos de hacer.
¡Viva Colosio! ¡Viva el PRI! Y ¡Viva México! Concluyo Cesar Adrián Tafoya.